Solíamos tener una chinchilla antes de que desarrollara una alergia a su heno. Lo tuvimos en una jaula en casa desde el primer día, donde podía interactuar con nuestros gatos a través de una malla. Nuestros dos gatos tienen muy poca presa, pero aún así nos aseguramos de vigilar la barbilla, no sólo cuando los gatos estaban cerca, sino cada vez que él estaba fuera y dentro de la casa. Las barbillas son muy destructivas y les encanta masticar cosas, lo que nos preocupaba más que el potencial de nuestros gatos para perseguirlas.
Como los gatos se alimentan naturalmente de las chinchillas, lo más probable es que causen más frustración a la barbilla que a sus gatos cuando ésta llegue a casa. Esto es lo que hicimos, y lo que recomiendo:
- Traer a Chin a casa y mantenerlo en una jaula donde pueda vegetar por lo menos una semana. Son muy sensibles al miedo y pueden tener un ataque al corazón si se asustan. Nuevos ambientes, nuevos ruidos, nuevas personas, todo eso es estresante para ellos.
- Déjenlo en paz por unos días. Los gatos lo olerán, y se aclimatarán a su presencia rápidamente. Después de unos días de estar solo, sáquenlo por períodos cortos y déjenlo explorar. Intente hacer esto con sus gatos cerca y vigile de cerca a todos. Deje que su gato lo vea jugando con la barbilla para que lo asocien con algo que sea suyo y que le guste. También puede darle a sus gatos golosinas durante este tiempo de juego. No es necesario, pero puede obtener algunas asociaciones positivas por tener la barbilla cerca.
- Prolongue gradualmente el tiempo que está fuera y jugando - pero si se pone demasiado nervioso, empieza a ladrar o a rechinar los dientes, guárdelo para que se calme.
- A medida que se sienta más cómodo, deje que los gatos lo “conozcan”. Sujétalo y deja que el gato lo huela. Dejamos que nuestros gatos nos olieran cara a cara, y todos fueron bastante agradables.
Recuerda que una chinchilla es presa de un gato y aunque sean brotes a veces el instinto depredador se activa y un gato puede perseguir la barbilla. Siempre estábamos en la habitación cuando todas las mascotas salían, sólo para asegurarnos de que no pasara nada. Como dije antes, siempre nos preocupaba más que la barbilla masticara un cable de corriente o que encontrara un nuevo escondite que el comportamiento de nuestros gatos.