Tirar de las esterillas puede dañar su piel, por lo que si no puedes arrancar las esterillas con facilidad, deben ser afeitadas por un profesional. NUNCA utilices tijeras para quitar los felpudos, especialmente si están cerca de la piel o no puedes ver la piel.
Dependiendo de la gravedad de los felpudos, debería llevar a su gato a un peluquero profesional o a su veterinario local. Muchos felpudos grandes deben ser tratados por su veterinario, y puede que tengan que sedar a su gato para que no experimente tanto dolor mientras se los quitan.
Si los felpudos vuelven a aparecer, es posible que haya que afeitarlo más a menudo, o que haya que cepillarlo con regularidad para evitar que vuelvan a aparecer los felpudos mientras el corte del león vuelve a crecer. El peluquero o el veterinario deberían poder aconsejarte.
Además, si su gato macho no ha sido castrado, debería considerar la posibilidad de castrarlo. Algunos gatos, pero especialmente los machos intactos, sufren a veces una enfermedad llamada “cola de semental” en la que sus glándulas segregan demasiado sebo y esto hace que el pelaje de la base de la cola se enrede. La esterilización de su gato reducirá las hormonas que indican a sus glándulas que segreguen.